Vale, veámoslo desde este punto de vista...
El juez Pedraz, de la Audiencia nacional, proclama que la pitada y abucheos que sufrió el Rey durante la final de la Copa no tienen relevancia penal, puesto que están amparados por la libertad de expresión. El rey estaba en un acto institucional y, aunque no lo parezca (entre otras cosas, porque muchos jugadores, no sé si por efectos de la adrenalina o porque son así, demuestran una monumental falta de cortesía y respeto cuando cumplimentan al Rey) solemne. Se le puede pitar y abuchear. No pasa nada.
Supongamos que el juez, en acto oficial, institucional, presidiendo un juicio en la audiencia, se ve abucheado y silbado. ¿Permanecerá impasible? ¿Tomará medidas contra quienes atentan contra el normal desarrollo de la sesión? ¿Imputará a alguien por desacato o por lo que proceda? Si así es, y me parece que así sucede y así debe ocurrir, ¿por qué en este caso no se admiten como libertad de expresión los gritos de los insolentes? ¿Por qué el Rey sí puede ser tratado de ese modo maleducado y macarra?
8 comentarios:
Nada, todos a la cárcel.
Pues estará amparado por la libertad de expresión; si lo dice el juez habrá que creérselo, pero no deja de ser una falta de respeto a un símbolo de España. Y ahí está la cuestión, los abucheos no fueron contra el Rey porque fuera una manada de maleducados republicanos que clamaban contra la monarquía, los abucheos dirigidos al Rey estaban dirigidos España. Viniendo de la ralea de que venían, no debería extrañarnos lo que pasó. Saludos.
Es que hay cada manada de maleducados republicanos... Los monárquicos son más finos, la verdad. Y sin son "juancarlistas" es que ya son el colmo de la finura.
Salud
Sr. Anónimo: lea usted bien el texto porque en ningún momento he dicho que los republicanos sean manada, ni maleducados. La frase se inscribía en un todo que quería explicitar que los abucheos al Rey no fueron abucheos antimonárquicos, es decir, prorrepublicanos, sino antiespañoles. Veo que, parece, no haberlo entendido bien, por eso quiero sacarle del error.
Salud-os.
Sr. Pesar; es usted un poco reaccionario ¿no?.
Salud y trabajo.
Abusando de la hospitalidad del Sr. Fernández, quisiera contestar, brevemente, al Sr. Anónimo.
Sr. Anómino para los de la izquierda oficial soy un carca reaccionario, como usted dice; para los de la derecha soy un peligroso rojo resentido. Así que saque usted mismo sus conclusiones.
Saludos.
Pues eso, Sr. Pesar: Usted ni fú ni fá.
Cordiales saludos.
Nuevamente voy a abusar de la amabilidad del Sr. Fernández. Sr. Anónimo, algo más de fu que de fa. Y nada, dejamos ya el tema. Saludos.
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